Como ya sabéis,
en Lingosworld no sólamente hacemos Lingos, también hacemos marcos. Hoy quiero
compartir uno de los primeros que hice para casa y que fue el inicio de muchos
otros.
No se si sólo me pasa a
mi (derivado de mi obsesión por reciclar objetos abandonados) o a vosotros
también, pero últimamente he encontrado bastantes marcos viejos abandonados en
la calle. Los marcos son un mundo, con ellos se pueden hacer un montón de cosas
a parte de enmarcar fotos o láminas y recuperarlos o transformarlos es muy
sencillo.
El marco en cuestión,
como os decía, lo encontré en la calle. Era sencillo, no tenía ninguna
filigrana y de un color azul bastante terrible. Pero pensé: algo haremos con
él...J.(mi pareja), cuando vio el marco dudó que aquello tan horrible pudiera
transformarse en algo que mereciese la pena, así que tenía que demostrarle que
no tenía razón...y me puse manos a la obra.
Navegando por Pinterest
(que maravillosa fuente de inspiración y de tesoros!) encontré unas etiquetas
de quesito antiguas que me encantaron, así que decidí forrar el marco con
ellas. Con la técnica del decoupage cubrí todo el marco y la verdad es que
quedó muy bonito. Pero entonces surgió la pregunta ¿que lámina enmarcaremos con esto? el marco es muy bonito pero tiene tantos colores que ninguna de las láminas que tenemos pendientes de enmarcar encajaba. Así que tuvimos que buscar alternativas y vimos un par de ellas que nos encantaron.
Compramos un trozo de
tela de gallinero, la grapamos por detrás del marco y voilá! un tablón de
anuncios sencillo y original. Hemos hecho alguno más por encargo y la verdad es que son originales y prácticos para sustituir el corcho de toda la vida.
Tenemos dos marcos enormes y preciosos que me encontré en la calle (sí, sí, y con dos días de diferencia!) y uno de ellos se transformará en un tendedero para polaroids!
¿Que me decís? Seguro
que tenéis algún marco desaprovechado en casa....
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