Los que nos seguís en Facebook ya habréis visto que hemos posteado algunas ideas divertidas para aprovechar los socorridos bricks. El coche hecho con un tetra brick de leche ya es un clásico, ¿pero a que no habéis visto el autobús?
Albert tiene fijación con todo aquello relacionado con el transporte así que cualquier cosa que hagamos con ruedas, le hace feliz. Y si además añadimos fotos de los primitos, los tíos, los abuelos y demás, entonces ya es la bomba! Así que vamos allá con los detalles del lingo bus familiar.
Necesitaréis:
- Un brick de los alargados (gazpacho, zumo, leche)
- Papel para forrar el brick
- 4 tapones de agua
- 4 tornillos
- 4 tuercas
- Un cuter
- Cola blanca
- washi tape, pinturas o lo que queráis para decorar y hacer los detalles
El proceso es muy sencillo. Primero de todo, lavar bien el brick por dentro y dejarlo secar.
Forrar con un papel bonito el brick, pegando el papel con cola.
Con el cúter hacer un agujero en los tapones y montad las ruedas con los tornillos y las tuercas en el brick.
Ahora ya podéis decorarlo como más os guste. ¡Imaginación al poder! Nosotros hicimos las los faros y las ventanas con washi y después pegamos fotos de la familia.
Una recomendación: si queréis que os dure un poco más, le podéis dar una capa de barniz para proteger el papel y la decoración.
¿Que me decís? ¿os animáis a reciclar los bricks de leche que tenéis en casa?