Ya estoy de nuevo aquí! Esta vez con una entrada algo más personal, más que nada porque veréis un trocito de mi casa, más concretamente, un trocito de la habitación de bolita, la zona de dormir.
A veces pensamos que cambiar la decoración de casa pasa por ir a Ikea, pintar paredes o pasarnos meses buscando elementos decorativos. Y no siempre es así.
A veces con cambiar algunos pequeños detalles y la ubicación de algunos muebles, los resultados son espectaculares.
La habitación de bolita ha cambiado según se hace mayor. Los vinilos de la pared, el césped y la cómoda reciclada han estado ahí desde antes que naciera. Primero la cuna, después la cama, luego el teepee indio...Poco a poco el espacio se ha ido adaptando a la nueva etapa.
El teepee (tienda india) fue regalo de reyes del año pasado. Los primeros meses fue un éxito total, incluso las siestas las hacía dentro. Pero han ido pasando los meses y al final se había convertido en un objeto decorativo que sólo servía de pasatiempo cuando venían amiguitos a casa a jugar. Y la verdad es que quitaba mucho espacia a la habitación. Así estaba la habitación:
Así que este pasado fin de semana, nos pusimos manos a la obra y decidimos darle un cambio a la habitación.
Quitamos los vinilos, que ya estaban despegándose y a bolita tampoco le hacían ya especial gracia. Plegamos el teepee y lo guardamos. Cambiamos la cama de lugar y sólo con eso, ya vimos un gran cambio. Luego añadimos unas estanterías hechas de unas maderas que encontré en la calle y que pinté con la maravillosa
Chalk Paint. Compramos los soportes para las maderas y listas, colgadas en la pared. Una hace de mesilla de noche y la otra servirá para libros y cosas bonitas.
Con dos cajas de zapatos pequeñas, hice unas sencillas estanterías cajón, totalmente decorativas. Las pinté y les pegué un papel bonito dentro.
La caja de frutas librería, la movimos al lado de la cama para que los cuentos estén más a mano cuando es hora de dormir. En el rincón donde estaba la cama, haremos un poco de biblioteca. Pondremos más cojines y con los peluches la idea es que nos sentemos ahí a leer o a escuchar música.
La guirnalda está hecha con retales de fieltro que tenía de otros proyectos, cortar y coser.
Con las tapas de las cajas de zapatos hice estos dos lienzos, que espero colgar este fin de semana en algún rinconcito que queda despejado.
Y este es el después. Una zona de descanso más despejada y más acogedora.
Espero que os haya gustado y que os animéis a hacer cambios y a reciclar! Lingo besos!